Estornudos, picor en los ojos y cansancio, son algunos de los síntomas que se notan con la llegada de la primavera. Conocida como alergia primaveral
Cerca de 10 millones de personas sufren en España enfermedades alérgicas. Cada año esta cifra va aumentando en un 2% y se estima que en 2050 más de la mitad de los españoles padecerán esta afección.
¿Qué es la alergia?
Es una respuesta exagerada del organismo (sistema inmunitario) ante el contacto con determinada sustancias que reconoce como extraña y dañina que se denomina alérgeno. Esto provoca una reacción que desencadena una serie de síntomas característicos y el sistema inmunitario responde generando una gran cantidad de anticuerpos llamados IgE. En los primeros contactos no produce ningún síntoma, pero quedará sensibilizado ante futuros contactos y se liberarán los síntomas típicos de la alergia.
Causas más frecuentes de alergia en adultos:
El polen, el polvo y los ácaros.
Sintomas:
- Conjuntivitis alérgica: afecta a los ojos y produce lagrimeo, picor, enrojecimiento, escozor e hinchazón.
- Rinitis: afecta a la nariz y presenta congestión y secreción nasal, así como picor y estornudos.
- Urticaria: afecta a la piel, que presenta picor, enrojecimiento, inflamación o hinchazón.
- Asma bronquial: afecta a los bronquios y produce tos, silbidos en el pecho y fatiga.
Medidas preventivas:
Evitar el contacto con estas sustancias. En el caso de la alergia primaveral tenemos que evitar el contacto con el polen, para ello debemos mantener las ventanas de la casa cerradas, especialmente durante las horas de sol, evitar cortar el césped o tumbarse en él, utilizar gafas de sol al salir a la calle, disminuir las actividades al aire libre, y no secar la ropa durante las fases de máxima polinización ya que se pega a las prendas. Hay productos eficaces que alivian los sintomas.
Tratamiento, suelen dividirse en:
- Cromoglicatos: evita que la histamina se libere en el cuerpo.
- Antihistamínicos: bloquean los receptores de la histamina, inhibiendo por tanto sus efectos. Son los fármacos más empleados en el tratamiento de la alergia.
- Inmunoterapia: consiste en administrar repetidamente los alérgenos hasta conseguir que sean tolerados por el cuerpo.
- Corticoides: fármacos con acción antiinflamatoria y supresora de reacciones de defensa, aunque suelen producir bastantes efectos secundarios.