La ministra de Sanidad, Mónica García, ha anunciado hoy que su departamento va a impulsar en esta legislatura el marco normativo necesario para que el Sistema Nacional de Salud (SNS) esté plenamente descarbonizado antes de mitad de siglo y contemple en sus leyes fundamentales la necesidad de ser un sistema resiliente y adaptado a la crisis climática.
Hay que recordar, en este sentido, que el sistema de salud global supone en torno a un 5% de las emisiones anuales mundiales, más que toda la aviación o el transporte marítimo.
“Es nuestro compromiso para avanzar hacia un sistema sanitario del siglo XXI: más humano y también más verde”, ha dicho en la inauguración en la sede del Ministerio de la jornada que organiza la Alliance for Transformative Action on Climate and Health (ATACH) de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre ‘Trasformación de los sistemas sanitarios ante el cambio climático’.
Para ello, de la mano del Observatorio de Salud y Cambio Climático, y de todos los ministerios implicados, se va a trabajar para que el SNS sea ejemplar en este sentido y para que el sistema sanitario a mitad de siglo, como mínimo, tenga emisiones cero, “porque creo que se lo debemos al Planeta”, ha dicho.
“Tenemos que tener en cuenta que la crisis climática es una crisis de salud pública y que, para proteger a los pacientes, para proteger a las personas, tenemos que tener el compromiso de proteger nuestro Planeta”, ha insistido.
Para ello, se quiere poner el marco e iniciar el diálogo y a visibilizar que los sistemas sanitarios también contribuyen un 5% a las emisiones y esto afecta a la salud de la gente. Entonces, por un lado, hay que adaptarse al cambio climático y, por otro lado, mitigar ese cambio con medidas que también implican a los sistemas sanitarios.
En la inauguración han participado el embajador del Reino Unido, Hugh Elliott; la directora del Departamento de Salud, Cambio Climático y Medioambiente de la OMS, María Neira; y el director de AECID, Antón Leis García.
La jornada cuenta además con la participación del secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla, y de la directora de ATACH, Elena Villalobos.
García ha recordado que la crisis climática es una crisis de salud pública, que es la mayor amenaza para la salud mundial en el siglo XXI y que España es el país de la Unión Europea más vulnerable a los efectos del cambio climático.
Por eso, ha manifestado, el Gobierno de España y el Ministerio de Sanidad “estamos absolutamente comprometidos con la lucha contra el cambio climático y, concretamente, con proteger la salud de las personas de sus impactos”
“No hay salud humana sin salud planetaria”, ha subrayado la ministra, que ha hecho referencia al enfoque “One Health”, para aceptar nuestra interdependencia con la naturaleza y asumir que el planeta tiene unos límites ecológicos que no pueden ser sobrepasados sin dañarlo.
El primer paso en este camin, ha dicho, es cumplir con el mandato de la COP 28 y abandonar de forma ordenada, progresiva y justa los combustibles fósiles, cuya quema es la causa última de la crisis climática y de la contaminación atmosférica, responsables de más de ocho millones de muertes adicionales cada año en el mundo.
En esta línea, esta jornada debe ser una oportunidad única para compartir experiencias y escuchar y conocer a los líderes globales de más de 80 países que están impulsando una revolución verde de los sistemas de salud en materia de resiliencia climática, nutrición, nuevas formas de financiación y descarbonización y sostenibilidad, especialmente de las cadenas de suministro.
Además de explorar formas de colaboración entre países que partan de su desigual responsabilidad en las emisiones de gases de efecto invernadero y el desigual efecto que el cambio climático tiene entre el Norte y el Sur global, buscando nuevas formas de cooperación y fondos al desarrollo centradas en la intersección entre salud y clima.
Joya de la corona
Mónica García ha recordado una vez más que nuestro Sistema Nacional de Salud es una fuente de orgullo para todos los españoles y la columna vertebral del estado del bienestar, su joya de la corona. Y que ahora toca cuidarlo y devolverle el orgullo a los profesionales y ciudadanos tras los recortes y la austeridad y las consecuencias de la pandemia de covid-19.
Eso pasa, ha resaltado, por modernizarlo frente a los retos por venir, incluido el gran reto climático, para convertirlo en un sistema de salud resiliente y bajo en carbono.
“No podemos olvidar que lo primero que uno aprende en Medicina es Primum non nocere, lo primero es no hacer daño; y por eso, lo primero que tienen que hacer los sistemas sanitarios de este siglo es no hacer daño a nuestro planeta y, por tanto, a las personas”, ha explicado García.