¿Sabes como aliviar el dolor de garganta?

Todos hemos padecido en algún momento de nuestra vida dolor de garganta. Te contamos algunos trucos naturales y caseros para acabar con el dolor de garganta.

• Miel con leche, en infusión... para conseguir bajar las molestias y la inflación de garganta.
• Gárgaras con bicarbonatoy miel. No tragar y no hacer más de tres veces al día podriamos resecar las membranas mucosas
• En una taza de agua tibia añade una cucharadita de sal de de mesa y haz con ella gárgaras.
• Té de tomillo: Pon una cucharada de tomillo seco por cada taza de agua hirviendo, cuela, espera a que se enfríe un poco y haz gárgaras. Con esta infusión calmarás el dolor de garganta casi en minutos.
• Infusión con una raíz de regaliz por taza de agua y beber un sorbo. Otra idea es preparar bolsas de té de regaliz o bien masticar un poco para que junto a la saliva creen un calmante para tu garganta.
• El té verde tiene muchas propiedades para nuestro organismo, pero si se bebe caliente o tibio calma el dolor de garganta. También se puede hacer gargaras con él.
• Mezclando media cucharada de bicarbonato sodico con media cuchara de sal en una taza pequeña de agua tibia. Haz gárgaras con esta preparación unas cuantas veces al día.
• Manzanilla: entre otras cualidades, calma el dolor de garganta, nos relaja, para el dolor de estómago. Y su sabor es delicioso.
• Miel y limón: muy popular y fácil de preparar. Dos cucharadas de miel y el zumo de un limón por taza de agua hirviendo, a la que se le añade un saquito de té común. Deja enfriar un poco y bebe sorbos para calmar tu garganta rapido.
• Beber agua, los líquidos humedecen las membranas mucosas, por lo que la sensación de dolor es menor.
• Evitar la sequedad del ambiente, con un humidificador ó simplemente con una buena ducha caliente
• Compresa caliente en la garganta: humedecer un trapo con agua caliente (no demasiado), escurrirlo y colocarlo sobre nuestra garganta para que empiece a funcionar. El calor ensancha los vasos sanguíneos y ayuda a la relajación de los músculos.

El dolor de garganta es el primer síntoma de resfriado, aunque también puede serlo de otras dolencias, si la fiebre empieza a subir o empezamos a sentir dolor en las articulaciones, tenemos que acudir al médico.