1.- Concilias mejor el sueño
Si eres una de esas personas para las que cada noche conciliar bien el sueño te supone un auténtico suplicio, seguro que te interesará saber que la postura en la que te acuestas puede influir en que lo consigas antes o después.
Según diversos estudios, cuando te duermes recostado sobre el lado izquierdo de tu cuerpo concilias mucho antes y mejor el sueño que si lo haces en cualquier otra postura. Además, también está demostrado que dormir sobre este lado hace que la calidad del sueño sea mejor y que te levantes mucho más descansado.
2.- Favoreces la digestión
Puede que no veas ninguna relación entre la postura que escoges para dormir y la calidad de tu digestión. Sin embargo, todo responde a cuestiones puramente anatómicas, que hacen que dormir sobre el lado izquierdo sea mucho más beneficioso.
Y es que, tanto el estómago como el páncreas recaen sobre este lado de nuestro cuerpo, por lo que recostarse sobre tu parte izquierda es la posición más natural para favorecer una correcta digestión. De esta manera, nuestros jugos gástricos se canalizan mucho mejor, y las enzimas pancreáticas son secretadas de forma más fácil.
Por el contrario, cuando dormimos sobre nuestro lado derecho la digestión se hace de manera mucho más brusca.
3.- Tienes menos probabilidades de sufrir estrés
Dormir sobre el lado izquierdo de nuestro cuerpo hace que tengamos un sueño mucho más reparador. Tras descansar en esta postura logras levantarte más despejado, con menos sueño, y también es menos probable que por la mañana te encuentres revuelto o tengas dolores intestinales.
Dormir bien es sinónimo de calidad de vida y de estar más relajado. Por eso, todos estos factores se traducen en una menor probabilidad de padecer estrés.
4.- Es mucho mejor para la salud de nuestro corazón
Según un estudio, el 80% del corazón se encuentra en el lado izquierdo de nuestro cuerpo, dormir sobre este mismo lado favorece su salud.
Esto sucede por que al sistema linfático le resulta más sencillo el drenaje, también es importante tener en cuenta que si dormimos del lado izquierdo a nuestro corazón le resultará más sencillo bombear y enviar sangre al resto del cuerpo, en parte por la posición de la vena aorta.
5.- Favorece el drenaje linfático
Como ya hemos visto antes, dormir sobre el lado izquierdo favorece a un correcto drenaje, porque este es el lado predominante en nuestro sistema linfático.
Es por el sistema linfático por donde la linfa transporta algunos elementos fundamentales como las proteínas y la glucosa para que se filtren por los nódulos linfáticos, para ser drenados precisamente hacia el lado izquierdo.
Por tanto, dormir recostados sobre el lado izquierdo de nuestro cuerpo es la postura más natural en este sentido.
6.- Sufres menos dolores de espalda y cuello
Seguro que te ha pasado muchas veces eso de levantarte con un dolor terrible de espalda y de cuello, sin saber muy bien por qué, ¿verdad?
Evidentemente, el descanso y la postura en la que dormimos tienen mucho que ver con ello. Por eso, según apuntan los expertos, es muy importante que no nos quedemos dormidos de cualquier manera, si a la mañana siguiente no queremos pagar las consecuencias.
Lo ideal recostarnos sobre el lado izquierdo de nuestro cuerpo, con una almohada colocada bajo la cabeza, ya que esta es la mejor manera de que nuestra columna vertebral descanse de la forma más natural posible.
7.- Favorece a una mayor unión con tu pareja, según los expertos
Por mucho que te sorprenda, dormir en una postura o en otra no solo tiene consecuencias directas sobre nuestro cuerpo y anatomía, sino que también podría influir en nuestra relación de pareja. Y esto no es algo que digamos nosotros, sino diversos expertos.
Al parecer, si tanto tu como tu pareja compartís esta postura al dormir, se trata de una señal de unión, y de que vuestra relación marcha muy bien.
8.-Despiertas de mejor humor
Si te parecían pocos los beneficios que nos aporta dormir recostados sobre el lado izquierdo, aquí tenemos uno más que seguro que te gustará saber. Y es que, según un estudio realizado por la Universidad de Hertfordshire, quienes optan por esta postura en la cama tienden a levantarse con más energía y de mucho mejor humor que aquellos que escogen cualquier otra posición para descansar.
Además, otra investigación de la empresa británica Sealy apunta a que las personas que duermen sobre este lado suelen ser más sociables que el resto.