Aunque el consumo de tabaco en Estados Unidos ha disminuido, en el resto del mundo ha aumentado significativamente. Aproximadamente 1,100 millones de adultos en el mundo fuman; de ellos cerca del 80% vive en países de bajos y medianos ingresos.
Fumar representa la principal causa evitable de muerte. De mantenerse la tendencia actual, se estima que para el 2030 uno de cada seis adultos morirá por causa del tabaco, es decir que 500 millones de personas hoy vivas, eventualmente morirán como consecuencia del tabaco, y lamentablemente el 50% de ellos lo hará en edades tempranas, perdiendo de 20 a 25 años de vida productiva.
Es el único producto de consumo legal que mata entre un tercio (1/3) y la mitad de sus consumidores, cuando es usado como lo indican los fabricantes. La salud de un porcentaje importante de la juventud del mundo está seriamente amenazada por sus mortales productos (Lancet 2006). En Estados Unidos se pierden 400,000 vidas al año debido al consumo del tabaco. En Latinoamérica se estima que se suceden 150,000 muertes por año, debido al mismo tóxico. Se estima que para el año 2020 el tabaco será la mayor causa de muerte y discapacidad, y matará a más de 10 millones de personas por año, causando más muertes que el SIDA, accidentes de tránsito, homicidios y suicidios, alcoholismo y drogas ilícitas, todos combinados.
Un tercio de la población mundial de 15 años y más fuman, siendo la cantidad total de mil cien millones de fumadores en el mundo. De estos, ochocientos millones pertenecen a los países en desarrollo. En el año 2025 los fumadores llegarán a 1,600 millones. El hábito de fumar es causa de unas 25 enfermedades comprobadas, siendo sobre todo responsable de: - El 30% de todas las cardiopatías coronarias; - El 30% de todas las muertes por cáncer; - El 90% de todos los casos de cáncer de pulmón; - El 80-90% de todos los casos de Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) o Enfisema. El tabaco es responsable de: - 70% de cáncer en la laringe; - 50% de cáncer en la boca; - 30-40% de cáncer de vejiga; - 30% de cáncer de páncreas. Los no fumadores que conviven con fumadores tienen un riesgo 35 veces mayor de contraer cáncer de pulmón que aquellos que no conviven con fumadores. En el mundo unos cien mil niños y jóvenes por día se convierten en fumadores. Son los que la industria tabacalera denomina como sus "fumadores de reemplazo", porque van sustituyendo a los que desaparecen prematuramente.
Está demostrado que la mortalidad por enfermedades cardiovasculares aumenta en los fumadores. El 29% de las muertes por enfermedades coronarias son debidas al tabaquismo. El mantenimiento del hábito de fumar tras haber padecido un infarto al miocardio, puede producir nuevos eventos. Los que dejan de fumar evidencian una reducción del 30 y el 40% a los cinco años, con respecto a los que siguen fumando.
Autor: Ernesto Díaz Álvarez